En una mañana fría y soleada, los aficionados que nos hemos acercado al Antonio Solana, donde hemos podido comprobar por los comentarios de la grada las ganas de los aficionados de ver futbol, recordando viejos encuentros y jugadas de partidos anteriores creando un muy buen ambiente de fiesta, que es en definitiva lo que debe ser este bendito deporte llamado fútbol.

Juan Quereda.- Ante un Villena con viejos conocidos,( Ricky y Vendrell), bien dispuesto en el terreno de juego y con una idea fija de jugar el balón el equipo visitante a estado dispuesto a meter en apuros a nuestro Alicante, durante toda la primera parte a sido para mí un partido a la vieja usanza recordando antiguos partidos de preferente donde sin un dominador claro los dos equipos han salido a jugar al fútbol y tener la posesión de la pelota , intentando crear ocasiones de gol, muy parecidos en cuanto a fútbol, con mucha lucha en el centro del campo , si bien es verdad que el alicante a dispuesto de alguna ocasión más, en definitiva una primera parte de lucha y con el resultado de 0 / 0 nos hemos ido al descanso.

Una vez reanudado el encuentro durante los primeros minutos, el Alicante ha estado un poco desordenado y apático y el Villena aprovechando está circunstancia ha desarrollado su mejor juego, fruto de ello llegó el gol del Villena y un poco de desorden en el equipo local, y al igual que en los cielos unos negros nubarrones se cernían sobre el campo. ¿Sería posible que no fuésemos capaces de arreglar este tropiezo?

Y esto es lo que yo creo que a todos los aficionados al fútbol nos hace ir partido tras partido al campo la magia de este deporte.

Con unos pocos cambios y un tesón admirable el equipo se ha repuesto y ha comenzado a crear peligro al portal villenense, fruto de ello han ido llegando los goles, Ruano, Toni,y nuevamente Ruano han dado la vuelta al marcador dejando en casa los tres puntos en litigio.

Un partido en definitiva difícil ante un buen Villena y resaltar que lo mejor del partido Ha sido el querer ganar y la remontada.

Y recordad que esto lo escribe alguien que todavía no sabe de fútbol.